lunes, 29 de marzo de 2010

Sorpresas. cap.12

En cuanto se fue, mis males regresaron; nauseas, dolor de cabeza, mi única cura eran sus besos.
Abrió la puerta y cruzo unas palabras con alguien.
Yo mientras tanto camine como pude al vestidor y empecé a sacar toda mi ropa de las maletas que ya estaban ahí.
Apenas llevaba unas cuantas prendas colgadas cuando Bill me abrazo por atrás, me beso el hombro y después acomodo su barbilla ahí mismo “entre mi hombro y mi cuello”.
-¿Por qué te levantaste eh?
-pues es que venía a ver que me voy a poner y recordé que todavía estaba todo en la maleta.
-tu deberías de estar acostada y des-can-san-do- hizo una pausa entre cada silaba.
-lo sé apropósito de por qué me levante, ¿quién era?
-el que interrumpió- hizo un gesto de odio- fue el que trajo las medicinas, pero después vi que Ashley estaba tocando en mi habitación.
-¿qué quería?
- nada importante.
-oh, qué bien.
Me ordeno que me tomara las medicinas y que fuera inmediatamente a la cama.
Las medicinas ayudaron bastante pero sus besos y su presencia terminaron por combatir mis males.
Los dos habíamos tratado de controlar nuestros impulsos – por lo qué había sucedido antes- así qué evitamos besos muy apasionados.
-ya me siento muchooo mejor ¿puedo ir al concierto?
-yo creo que deberías descansar además solo te vas a aburrir.
-claro qué no, jamás me aburriría
-te juro que te quedaran miles de conciertos a los que me acompañaras, pero descansa hoy ¿sí?
-bueno si, pero ¿me prometes algo?
-¿qué?
-la primera que hagas lo imposible por regresar pronto.
-Excelente-me miró esperando la segunda promesa.
-es algo tonta- mire mis pies evitando su mirada-la segunda es que no te enamores de alguien más- lo abrace y hundí mi cara en su pecho para que no viera mi cara.
- haré lo que pueda…
-!¿Qué?¡- inmediatamente me aleje de él para permitirme mirarlo a los ojos.
-esa promesa no tenias ni que pedirla. Yo estoy perdidamente enamorado de ti y no tengo ojos para nadie más. Mejor tu prométeme algo..
-¿Qué?
-que descansaras y no andarás danzando y viendo que anda mal
-haré lo que pueda...-imite su tono y su frase.
Sonó su celular, compartió unas cuantas palabras con esa persona y colgó. Yo no entendí nada pues hablaban en alemán.
-Te importa, si nos vamos a mi habitación para que me arregle Ashley.
-pues al perecer no le caigo muy bien pero yo voy.
Me llevo en brazos hasta su habitación, yo abrí la puerta. Detrás de nosotros venia la maquillista quien contemplo todo hasta que me dejo en su cama.
Se sentó en el sillón rojo escarlata y comenzó su trabajo, Bill y yo estuvimos charlando todo ese tiempo hasta llegar al punto de ignorar su presencia, por lo qué pronto termino su trabajo.
Tom y Georg llamaron a la puerta y Ashley les abrió.
-hola, ¿te sientes mal todavía?
-pues poco.
-¿te vas a quedar?
-si- hice cara de niña berrinchuda- el me dijo que me quedara.
-es lo mejor Andrea.- simulo regañarme.
- si, así en la noche ya estarás muy bien.
-eso sí, y hoy tenemos tiempo de ir algún lugar, así que preparare todo.
-¡oh ¡eso suena mejor.
Se acerco Bill y me dio un beso, sencillamente apasionado y tierno, nuestros labios bailaban al ritmo de mi alocado corazón, en ese momento solo éramos “el y yo”. Pasaron varios segundos, oí a lo lejos que alguien se limpiaba la garganta y de algo estaba muy segura “no era un hombre”.
-Bill, no es que yo quiera interrumpir ni cortar tanta derramadera de miel pero SE NOS HACE TARDE.
Bill corto nuestro beso dulcemente se puso en pie, me beso la frente y dio la media vuelta.
-ya vámonos desesperado.
Salieron los 4 en fila en primer lugar, una mirada envenenadora “Ashley”, seguida de Bill, Tom y Gustav por ultimo salió Georg.
-Georg te lo encargo ¡eh¡ y promete una recompensa- y si que le encantaría esa recompensa.
-tú no te preocupes yo me encargo Andy.
Cada célula de mi cuerpo, cada partícula que me conformaba, mi sangre, mi piel pedían a gritos su voz. Prendí la tv, y en fox estaba una película que hace ya algunos años había sido mi pasión: Amanecer [de la saga Crepúsculo], justo estaba en el si acepto de la boda, una ola de aplausos recorrió.
Inconscientemente en mi cabeza se creaba una hermosa maraña de pensamientos se tejía en mi mente:
“Bill y yo en el altar, el me tomaba por la cintura yo aferrada a sus brazos, nuestros labios juntos al fin, ese beso era la garantía que definía: que mi vida ya era suya, que mi corazón funcionaba solo si él así lo deseaba, simplemente todo de mi era de él y nada más.”
Toda la película me la pase llorando, y es que desde que vivía en este sueño era tan cursi y frágil.
Tenía ya planeada la sorpresa esta noche, solo me faltaba arreglar algunos detalles sobre la decoración. Estaría la mayor parte del día sola, pues a las 2 era el concierto y a las 5 conferencia de prensa, así que estarían llegando como a las 7:00.
Toda la tarde arregle pendientes para otros eventos, hice reservaciones en Yucatán y aproveche para avisarles a los choferes a donde iríamos por la noche.
También mande a recoger a la novia de Georg con sus amigas, estaba segura que esta sorpresa lo mataría. Sería una noche inolvidable y muy divertida para varios.
Después me fui a bañar a mi habitación y aproveche el tiempo para arreglar la ropa, me puse uno vestido strapless blanco de globo me llegaba un poco más arriba de la rodilla, con unos zapatos altos fucsias. Me agarre el cabello en una cola de cabello y me alise el pelo que caía de esta.
Ya había llegado la novia de Georg al hotel junto con sus amigas asi que fui a su habitación para presentarme y decirles el plan.
Toque la puerta y me abrió Fergie [la novia de Georg] era realmente diferente a como la imaginaba, siempre pensé que sería glamurosa, e impresionantemente atractiva pero no; ella era delgada, medía aproximada mente 1.65, tenía un cabello de un tono chocolate, su piel blanca como la nieve unas cuantas pecas resaltaban debajo de sus ojos miel.
-hola, soy Andrea.
-hola, si tu eres la novia de Bill, ¿no?-me dijo mientras me besaba las mejillas.
-sí, y la organizadora de este perfecto plan.
-fue una gran idea, Georg me ha hablado mucho de ti.
-¿de verdad?
- sí y los dos pensamos que eres lo que Bill siempre busco, bueno realmente no te conozco, Pero Georg dice que eres una persona muy transparente y estoy de acuerdo con él.
-oh gracias.
-pero pasa, te presentare a Hannah y a Victoria.
Me presento a ambas, Hannah era muy atractiva, alta con un cuerpo muy bien proporcionado, un cabello rubio que le llegaba a la mitad de la espalda, su piel era bronceada y sus ojos color esmeralda, llevaba un vestido halter con la espalda descubierta color rojo escarlata. A pesar de que físicamente aparentaba ser totalmente “artificial y materialista” era muy gentil y dulce.
Victoria era todo lo contrario, desde un avión le podías ver lo inocente y tierna que era pero a la vez guapa y muy sociable. Ella era una estatura promedio entre Hannah y Fergie, su cabello chocolate le llegaba a los hombros con unos perfectos risos, también una piel muy blanca, una sonrisa encantadora, y unos ojos color marrón con unas pestañas muy espesas. Tenía puesto un vestido a la rodilla gris, con un cuello en “v” que moldeaba una perfecta figura.
Nos divertimos por un rato, charlamos sobre su viaje y me preguntaron miles de cosas sobre mi relación con Bill. La mas emocionada era Fergie pues decía que ya no sería la única odiada por varias fans. Después uno de los choferes que se había quedado las llevo al edificio acordado y ahí esperarían hasta nuestra llegada para darles la sorpresa.
No sé porque tenía la impresión que Tom se iba a enamorar esta noche, bueno tanto así como enamorar no creo era imposible, pero seguro se iba a divertir.
Sin querer habíamos quedado en parejas.
Yo ya los esperaba en el lobby cuando ellos llegaron, me estaba tomando un café mientras le enviaba un correo a mis padres avisándoles que estaba bien.
Cuando llegaron les pedí que se fueran a bañar y a poner guapos- que más ya era imposible- por que hoy teníamos una gran fiesta.
Todos fueron muy rápidos y yo todo el tiempo estuve con Bill quien ya sabía todo sobre Fergie pero lo que no sabía era a donde íbamos a ir.
Las camionetas siguieron las instrucciones, nos llevaron al edificio que indique en el centro de Guadalajara. Entramos al ascensor y apreté el numero 20, todos tenían cara de intriga y Tom no dejaba de decir cosas tratando de adivinar.
Llegamos al último piso y subimos unas escaleras más, abrí la puerta de metal y la música se empezaba a escuchar al entrar todos quedaron sin aliento.
La azotea estaba arreglada con unos sillones negros y rojos, mesas altas, una gran pista de baile, un D.J. y la barra del bar-man totalmente iluminada con luces de neón, velas alrededor y una vista increíble; las luces de la Ciudad, y a lo lejos se alcanzaban a ver las grandes olas del mar. Era una combinación romántico-divertido.
Lámparas en mesas por donde quiera y la música obtenía un gran volumen.
-por ultimo tengo una sorpresa más pero especialmente es para ti Georg.
- ¿de verdad?
-si, pero necesito que volteen todos para allá-señale hacia el lado contrario de la puerta.
-muy bien.-todos giraron excepto Bill que me tenía apretada a su costado y ya sabia la sorpresa y sobre todo eran chicas y el ya no necesitaba.
-listos-con la mano le hice la señal al mesero para que abriera la puerta y pudieran entrar las chicas.
-a la des tres voltean eh¡-ellas ya estaban de tras de m i-uno, dos y tre……
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perdonenme...¡
oh lo see soii muii inpuntuaal,
lees diiria que atropelle a un perrito y que estuve con el en el hospital pero !no¡
jejeje.
la verdad esque eh estado muy ocupada por que en 15 días son mis xv años entonces entre semana hiba a la escuela (en la tarde) y pues no tenia mucho tiempo, entonces escribia poco a poco y los fines se me hiban en ensayar...
pero juro que ahora que estoy de vacaciones tratare de escribir más ok?
bueno espero les guste..
un besothee
biie...

miércoles, 17 de marzo de 2010

espejismo cap.11

Abrí los ojos, estaba con la cabeza en las piernas de Bill y mis piernas (dobladas) quedaban en el asiento de alado de piel color hueso. La delgada mano derecha de Hill sobre mi estomago me atría fuertemente hacia su cuerpo mientras la izquierda estaba debajo de mi cabeza para entrelazarla con la mía.

- hola - lo mire y sonreí- ya vamos a llegar?
- -hola linda, pues hace como 10 minutos anunciaron el aterrizaje en media hora.
- ¡OH ¡que bien.

Me incorpore rápidamente, al instante todo me dio vueltas. “seguro fue que me pare rápido”

-¿estas bien?
-si, solo me maree un poco
-¿segura?
-si, solo fue que me pare rápido- ya no quería hablar para que se me pasara al horrible sensación

me recargue en su hombro y cerré los ojos “ por favor Dios, que se me quite esto”.Inhale y exhale mil veces y nada cada vez me sentía peor.

- tu no estas bien, ¿ que te pasa?
-tengo nauseas y me empieza a doler la cabeza –las nauseas subieron por mi garganta dejando un rastro de ardor a cada paso. me desabroche el cinturón a prisa y corrí hacia al baño.
Me moje la cara. las piernas me temblaban, me sentía sin fuerzas, me pegue a la pared y me deslicé hasta la alfombra.

-linda que pasa ¿estas bien?

No pude contestar, sentía un sabor amargo en la boca que se intensificaba a cada momento pase varias veces saliva tratando de eliminar ese sabor.
-¿puedo pasar?- su voz ya sonaba histérica
.si...-susurre

Abrió despacio yo me arrastre lo mas lejos posible de la puerta para que pudiera abrir..
Cuando me vio inmediatamente se arrodillo a mi lado...
-¿que hago? estas muy pálida- se veía asustado lo que me decía: lucia fatal
- solo ayúdame a para, no tengo fuerzas.

Me cargo y me llevo al asiento.

.-estamos aterrizando, debe de haber un doctor aquí así que te llevare- dijo en tono de promesa.
- aja.- solo pude emitir ese sonido que no era nada parecido a una palabra.

cerré los ojos y sentí como las llantas del avión rozaban el piso.
Todos se empezaron a parar.

- ¿que le pasa?
- se siente mal- sus brazos me empezaban a levantar.
- ¿a donde vas?
- aquí debe haber un doctor ¿no?
- si, ¿no la piensas llevar tu verdad?
-si.
- Bill allá afuera hay camarógrafos, fans y gente que todo lo especula a su manera. la puede llevar alguien mas.
- no. vela esta muy mal
- Bill, en la sala ya debe estar Fernando se adelanto con las camionetas. Dile que se encargue del registro del hotel.- interrumpí esa charla, que al parecer era Tom.
- no te preocupes- me beso la frente y eso fue lo ultimo que escuche, y me desconecte del planeta.

Comencé a recobrar el conocimiento gracias a un olor que me quemaba la nariz.

-Bill...Bill- sin pensarlo, mi cuerpo pidió su necesidad.
- emm, no el no esta aquí, me pidieron que te trajera, tuvieron que irse.
-aaaa….

Las nauseas regresaron, todo lo veía doble otra vez y tenia escalofríos
Me dio el doctor una pastilla para controlar las nauseas.
Cuando salí la persona que estaba conmigo ( a quien nunca había visto) casi venia cargándome. Afuera nos esperaba una camioneta, no fue necesario dar instrucciones ellos ya sabían todo.

Todo momento tuve los ojos cerrados .inhale y exhale pero esta vez era para disolver este nudo en la garganta. Quería llorar, de desesperación, realmente me sentía muy mal y Bill no estaba aquí.
Mi celular comenzó a sonar en mi bolsillo.

-¿si?
-¿como estas. Nena?
-igual- dije un poco seria.-ya vamos para allá.
- OK. Aquí te espero.
- aja- y colgué.

Ahora me sentía peor, mi cabeza no dejaba de decir “ si estuviera el en tu lugar, tu no te despegarías ni un segundo de el”

Al llegar al hotel (fiesta Americana Grand County Club).vi a Bill parado en la entrada principal esperándome.
Era una pared de cristal enorme, entre los vidrios corría agua y caía en una camino de piedras.
En cuanto estuve enfrente de el me abrazo.

- ¿ya estas mejor?
- no- me aferre con una mano a su cintura.
- ¿quieres ir al doctor?
-o. mejor me voy acostar.
- bien, te cambie tu habitación por una suite.
- ¿Por qué?
- para que estés más cómoda- empezamos a caminar.
- mm bueno, ¿que hora es?
- 12:15
- ¿que horas es el concierto?
- a las 2:00, pero tu te vas a quedar a descansar.
- no. Me sentiré peor si me quedo sola.
- perdón por no quedarme contigo en el aeropuerto, pero tuvimos que huir- se mano se aflojo en mi hombro.
- ¿Por qué no quieres que nadie me vea contigo eh?
- ¿por que dices eso?
- sabes por que lo digo, te escuche hablar con Tom. y cuando hay cámaras desapareces de mi.
- son tus suposiciones, no es verdad- subimos al ascensor y apretó el numero 18.

Ya no tenia fuerzas para seguir peleando la verdad.
Cuando salimos del ascensor, caminamos todo derecho y dimos vuelta a la izquierda, se detuvo a la mitad de este, frente a una habitación con una puerta chocolate.
Abrió la puerta y entramos, me tire a la cama – OH que grabe error- todo me dio vueltas.
Tenia que recuperarme en 1 hora no me quería quedar sola.

Saque mi celular y marque un número que hace mucho tiempo fue el primero de mi lista de contactos.
Si, Carlos mi ex novio, fue mi primer novio “oficial”, una relación muy larga pero inolvidable. Lo conocí a los 13, pero tanto tiempo junto termino por separarnos.
Sabía que eso no era lo mejor pero si le marcaba a mamá se preocuparía y no quería eso y Carlos se encontraba en la facultad de medicina. Que mejor que alguien que tiene fresca la memoria.

- hola Carlos.
- hey, ¿como estas nena?- esa ultima palabra se escapo de sus labios.
- eh, pues me siento un poco mal así que necesito de tu ayuda.
- ¿Qué tienes?

Le explique todo lo que tenia. Bill se sentó en la cama, justo a lado de mí. Todavía mi corazón se encendía cuando lo tenía cerca, perdí el control de mi misma.
Carlos me dio el nombre de unas pastillas, jarabes y hasta suero.

- muchas gracias de verdad me encanta que seas Doctor- no podía negar que aun lo quería y mucho. Bien dicen “nunca se olvida el primer amor”
- lo se nena, quiero que sepas que te eh extrañado mucho, que mi vida a tu lado fue como sagrada y no quiero que eso acabe.
- Carlos yo también te eh extrañado- sin pensarlo una lagrima recorrió mi cara y callo al hermoso edredón rojo.- me tengo que ir ¿ok?, cuídate muchísimo y nunca te olvidaré- prometí y colgué.

No estaba bien hablar de amor con Carlos teniendo a un lado al amor de mi vida.
Tenía la ventaja de que todo el tiempo hable en español.
Llame a recepción y pedí que me trajeran esas medicinas y lo cargaran a mi cuenta.

- listo.- yo seguía enojada y quería una explosión.
- bien, espero no tarden con eso.
- ojalá.
- ¿era tu mama?
- no un amigo doctor-“ que no se halla dado cuenta de nada”
- ah, ¿tienes confianza en mi?
- ciegamente.- me levante y fui a sentarme con el, lo abrasé, me acomode en su cuello y el puso sus manos en mi cintura.
- ¡por que llorabas?
- ah es que hacia mucho que no hablaba con el-“¿Qué le digo”
- mmm.-no me creyó.
- Bill ya dime que pasa.¿por que cambias de actitud, cuando hay gente?
- Andrea, creéme es lo mejor y solo lo hago por ti.
- pero ¿Por qué?
- te protejo de los medios ¿tu sabes que pasaría si las fans se enteran?
- ¿se enojaran?
- si posiblemente, pero también pueden agredirte. Cuando me valla ¿Quién te va a cuidar?- esas 4 palabras taladraron en la parte mas sensible de mi corazón. necesitaba algo que calmara este dolor.
- tengo miedo Bill- me colgué a un mas de su cuello y sin querer como llave de agua, brotaron mis lagrimas que mojaron su cuerpo- tengo miedo de haberme enamorado de un espejismo.
- Andrea soy real – tomo mi mano y la puso justo en su corazón dejo la suya sobre de la mía –esto que siento es por ti, tu eres el motor que hace prender este corazón.
- no quiero despertar de este sueño, quisiera que fuera eterno.
- yo también- tomo mi cara entre sus manos, me acerco más a el y me beso, enrede mis dedos en su cabello mientras mi otra mano subía de su cintura hasta su cuello.

El bajo sus manos hasta mí cintura, me apretó a el, su mano calida subía delicadamente y consigo subía mi playera. No se como sucedió pero su mano quedo debajo de mi playera- al roce perfecto con mi piel-.
Algo pasaba en mi interior, me senté en sus piernas y enrosque las mías a su espalda. Sencillamente lo amaba.
Nuestros corazones ahora latían al mismo tiempo, el era la persona a la cual le daría el último latido de mi corazón.

“toc.. toc..”

Me era muy difícil si quiera tratar de despegar mis labios de su boca…..

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hola, perdon por haberme tardado tanto en escribir pero de verdad fue cuestion de tiempo pero bueno despue de todo aqui esta....
Prometo que antes del el lunes tendran capitulo nuevo, l más seguro el viernes ya que el lunes tengo un examen de 5 horas y sabado y domingo me encerrare a "estudiar".
Mercedes erers mi razon de escrbiri numero 1 jeje gracias..
bueno me voy..
biie.

lunes, 1 de marzo de 2010

tu me debes algo cap.10

- Oye tu me debes algo, ¿no recuerdas?
- Aaa si, qué?
- No te hagas, en al auto hicimos un trato,… ¿porque te comportaste medio raro hoy?
- Yo, en qué momento?
- Pues todo el tiempo, en el concierto en la sesión de fotos, y no sé, a lo mejor te molesto como me comporte en la mañana.-no me había puesto a pensar que posiblemente se había dado cuenta de mis “celos”
- No, yo no me he molestado por nada, solo que pues estaba un poco estresado con todo lo del concierto.- dijo muy seguro pero había un rastro de nervios en su voz.
- Bill creo que te eh demostrado que puedes confiar en mí, me gustaría que cuando te preocupe algo me digas.- le dije mientras le acariciaba la mejilla.
- Ok perdón, prometo hacerlo, pero de ¿Qué comportamiento hablas eh?
- Aaa no nada, tonterías-lo dije entre risas forzadas.
- Bueno pero ¿que “tonterías”?.
- Hay nada importante créeme.
- Perdón ¿que habías dicho de la confianza?- dijo sarcastico
- Ok, por ponerme celosa con las tipas esas de la entrevista..- escondí mi cara detrás de mi cabello, lógicamente estaría como jitomate.

Bill no dijo nada solo me miro, no entendí esa mirada tan fuerte y a la vez tan dulce, era sería pero en los mas hondo de sus pupilas “caramelo” surgía un reflejo tierno.
- Te dije que eran tonterías- dije casi susurrando
- Para mí no es una tontería Andrea, es un honor que alguien tan guapa e inteligente como tú sienta celos de alguien tan artificial por mí.
- Gracias pero la verdad es una tontería, debo acostumbrarme a esas cosas así es tu vida…- con cada palabra iba bajando una milésima de volumen mi voz, hasta llegar a susurrar.
- Qué te parece si dejamos eso de las aclaraciones para otro día, y mejor bailamos…- me dijo mientras me ofrecía su mano su derecha.

Bailamos por un largo rato, el ruido del agua que caía en la cascada, la luna arriba de nosotros, las velas y el inconfundible olor a rosas era el sueño perfecto de cualquier niña.
Seguimos bailando mientras al oído nos contábamos algunas cosas. Nos besamos más de una vez, besar sus labios carnosos y cálidos, era como besar el pétalo de una flor.

Sus labios estaban impactados contra los míos, con la boca entreabierta y me dijo:
-nunca te quiero perder….
Mi corazón exaltado no me cabía en el pecho, esas simples palabras habían hecho crecer mi amor por él, no sabía que decirle, tenía tantas ganas de decirle que lo amaba pero podían ocurrir 2 cosas: 1 que me contestara lo mismo por puro compromiso (porque era muy pronto). 2 que no me contestaría nada y era lógico que en ese momento mi corazón se despedazaría.

- Nunca me perderás...


Cuando vi mi reloj, marcaban las 3:00 a.m., el tiempo entre aquellos tiernos brazos, se pasaba tan rápido, me hiso reír bastante con sus bromas, o intentando hacerme cosquillas

A eso de las 3:00 de la mañana, salimos del lugar y nos dirigimos al hotel.
Me acompaño a mi habitación:


-Bueno amor, te dejó descansar si?- se despedía pero no se iba y cuando por fin dio media vuelta y se fue….
-Bill……….
-¿qué pasa?
- te quiero…- nunca levante mi mirada y jugaba con mis manos.
- Andrea yo no sé que sea esto que siento, pero es algo hermoso que jamás había sentido, por lo tanto creo que es algo más que querer.
-que descanses
-igualmente preciosa.
Ese día dormí como nunca antes, tuve el sueño más raro pero a la vez el más hermoso. Mi sueño fue muy brilloso, estaba sentada a la orilla de una alberca, estaba sola pero me sentía rara, a lo lejos Bill venía nada hacia mí nadando .Cuando llegó me acarició el estomago, y parecía hablar con él..
En ese momento desperté… el reloj marcaba las 7:30, di varias vueltas en la cama intentando volver a conciliar el sueño, no lo logre, así que decidí levantarme y comenzar a arreglar todo, tenía que guardar mis cosas pues el vuelo a Guadalajara salía a las 10:00 a.m.
Me metí a bañar, cuando salí tuve algunos conflictos para decidir que me pondría, al final me decidí por unos jeans negros, una playera de manga corta blanca con estampados negros y platas, y unos tenis negros.
Me amarré el cabello, como siempre el maquillaje más discreto.
El resto de la mañana me la pase guardando mi ropa, Le llamé a mis papas para avisarles que ya me iba…
-hola mamá
-Andrea, te eh estado marcando como mil veces y jamás contestaste, para que quieres el teléfono?
-tranquila mamá, lo que pasa es que eh estado muy ocupada con lo de la gira y todo, de hecho solo hablo para avisarte que hoy salgo para Guadalajara.
-a qué hora?
- a las 10:00, prometo que llegando allá te marco si?
-ok Andrea, pero cuídate mucho hija, recuerda que te queremos mucho, y disfruta esta gran oportunidad.
-Gracias mamá yo también los amo mamita, salúdame a todos y en un rato le llamo y platicamos si?
-ok, con cuídate…
Ya no sentía la presión de hablarle a mis padres.
Eran 8:55, teníamos que salir de aquí a las 9:30 a.m. Baje mis maletas a la recepción y le pedí a Fernando que las llevara a guardar. La recepcionista llamó a la habitación de Bill pero nadie contesto, así que me dediqué a hacer las llamadas necesarias para confirmar todo en Guadalajara. Mientras esperaba a que bajará Bill ordene un jugo, de pronto empezó a vibrar mi celular.
-¿Bueno?
-hola hermosa, ¿donde estas?
-mm en la recepción, te estaba esperando para desayunar.
-aaa muy bien, yo estoy afuera de tu habitación pero voy para allá.
-bien aquí te veo.
Esperamos a los demás, nos fuimos antes, para pasar a desayunar a algún lugar antes del vuelo.
Fue muy divertido todos eran muy graciosos…
-¿qué pedirás, mi amor?- le dijo Gustav a Tom mientras le acariciaba el cuello
-no lo sé cielo, lo que tu pidas yo pido mi reinita.-dijo sarcásticamente.
-hay Tom me sonrojas- y lo abrazó por atrás..
Todos rompimos en carcajadas al ver “su escena de amor “.Todo el desayuno se comportaron así, fueron puras risas….

Nos subimos a su avión, yo me senté con Bill, nos abrazamos, Gustav y Tom se la pasaron imitándonos y burlándose pero no nos importo y más nos lucíamos con besos bastante apasionados…. Hasta que se dieron cuenta que no podía con nosotros y se dieron por vencidos. Bill y yo el resto del vuelo no la pasamos dormidos, y ellos aprovecharon para sacarnos fotos…